Desde hace unos meses ronda la intención política de instaurar el fin de la jornada laboral en nuestro país a la 18.00 horas, tal y como nuestra vecina Portugal o, cruzando el pequeño charco, Reino Unido. Pero ¿cómo afectaría este cambio de horario laboral al autónomo y las pymes de establecerse finalmente esta iniciativa?
La propuesta, que nacería con la intención de ser aplicable a empresas con horario de oficina, surge de la idea de conciliar el ámbito profesional y familiar y adaptarse a los nuevos modelos de trabajo, modelos que tienen mayor presencia y éxito en otras latitudes. El estilo de vida laboral y la cultura corporativa del presentismo dominante en nuestro país hacen cuestionarse la viabilidad de la iniciativa.
¿Cuáles serían los nuevos hábitos y sus consecuencias? Hay que partir de la base del cambio del actual huso horario por el del meridiano de Greenwich, lo que atrasaría una hora el reloj solar y daría lugar a una hora más de sueño aunque nos levantaríamos a las misma hora.
La jornada laboral sigue siendo de ocho horas pero con esta medida se convertiría en continua; la jornada comenzaría a las 9 de la mañana y sólo tendría un pequeño receso para comer a las 1 de la tarde. Igualmente la hora de la cena se adelantaría a las 8. Un sistema de tiempo alineado con el horario escolar.
Positivo para autónomos del sector servicios
La principal ventaja del autónomos es la libertad de horario comercial, una ventaja regulada por el Real Decreto Ley de 2012 para impulsar el comercio. Dicho esto, la iniciativa de la que venimos hablando se presenta inviable para el trabajador por cuenta propia que aunque no sería protagonista de ella sí experimentaría sus principales efectos.
Algunas asociaciones de autónomos hablan de consecuencias positivas para el sector servicios y el pequeño comercio, algo lógico si pensamos que a partir de las 6 de la tarde muchos trabajadores el resto del tiempo “libre”, bien para tomar un café, bien para hacer la compra en la tienda de barrio o recibir la visita del fontanero para arreglarte una tubería de casa.
En definitiva el supuesto horario laboral favorecería el surgimiento de una población de servicios compuesta por muchos autónomos que comenzarían su jornada cuando otros trabajadores la terminara.
Aumento de la productividad con el nuevo horario laboral
Como decíamos al principio, la iniciativa pretende cambiar el modelo de trabajo para incentivar la productividad, eliminar el presentismo arraigado y reducir el estrés que éste último produce. La Organización Internacional del Trabajo calcula que hasta un 3% del Producto Interno Bruto (PIB) de las naciones se pierde por el estrés..
Hasta que la medida no se materialice será muy difícil comprobar si efectivamente la jornada laboral hasta las 18:00 horas tiene ese efecto esperado pero el presidente de Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles (ARHOE), José Luis Casero, afirma que la productividad se incrementaría un 19% y el absentismo caería un 30%.
Con este panorama de fondo, algunos expertos hablan de beneficios tambień económicos. Prueba de ello es Suecia, donde la empresa Toyota, aumentó un 25% los beneficios.