Revisando la prensa de esta semana me he encontrado con un par de artículos que recogían las propuestas de algunas asociaciones de autónomos, para que el Gobierno las considere antes de la aprobación final de la reforma laboral. El objetivo de dichas medidas es facilitar que un mayor número de personas se animen a ser parte del colectivo de los trabajadores por cuenta propia.
Entre estas propuestas destaca una demanda que en Infoautonomos también hemos venido planteando y de la que nos hemos hecho eco en otras ocasiones: la rebaja en la cuota de autónomos.
La medida presentada al Gobierno ha sido la de establecer exenciones en dichas cuotas mensuales en dos supuestos:
- Para aquellos que trabajan por cuenta ajena pero además durante unas horas a la semana o al mes realizan una actividad económica por cuenta propia; actividad que hoy en día no suele declararse porque el pago de las cuotas no compensa al trabajador que se encuentra en este supuesto.
En este caso, se propone una rebaja en la cuota de entre el 50 y el 70%. Según las asociaciones, medio millón de españoles se encuentran en esta situación.
- El segundo caso sería el de aquellos que trabajan esporádicamente en los negocios familiares, echando una mano, y que tampoco cotizan ni declaran a Hacienda. Todos conocemos casos que se enmarcarían en este supuesto (se trata de unas 200.000 personas, según las asociaciones), como por ejemplo el de los hijos que trabajan como camareros en el restaurante de los padres en meses de mucho trabajo.
Para estos casos se pide una rebaja en la cotización del 50% durante los dos primeros años en los que estas personas regularicen su situación. En este caso recordamos una campaña que se lanzó hace escasos meses
Las asociaciones estiman que, de ponerse en práctica estas exenciones, sólo durante el primer año podríamos estar hablando de 100.000 nuevas altas en el régimen de autónomos como consecuencia de trabajadores pluriempleados (primer supuesto) y 75.000 cotizantes más provenientes del segundo caso.
Otras propuestas que las asociaciones han hecho llegar al Gobierno, relacionadas con las rebajas de las cuotas de autónomos, prestaciones y bonificaciones por contratación, serían:
- La posibilidad de la cotización de los autónomos a tiempo parcial, otra vieja demanda del colectivo. Es decir, que cada autónomo elija su rango de cotización en base al tiempo real que dedica a su actividad y no pagando siempre la totalidad de la cuota, como ocurre actualmente, independientemente de cuáles sean sus beneficios o su dedicación. Esta propuesta vendría a complementar la anteriormente mencionada sobre la deducción del 50% de la cuota para aquellos que trabajan, además, por cuenta ajena.
- Una bonificación del 50% en la cuota para los menores de 30 años y las mujeres mayores de 45 que se den de alta como autónomos colaboradores durante tres años. Con esta medida se pretendería reconocer el trabajo de los familiares de los emprendedores.
- Sistema específico por cese de actividad, bajo los mismos supuestos que se reconocen en el caso de los despidos (cuando la empresa se vea sometida a la “disminución persistente de ingresos o ventas durante tres meses consecutivos”). Las asociaciones demandan así que aquellos trabajadores que se vean afectados por el cese de la actividad de un autónomo también tengan derecho a una prestación por desempleo.
- Bonificaciones por contratos de formación y aprendizaje, también para los autónomos. Se pide que los trabajadores por cuenta propia que hagan este tipo de contrato también puedan beneficiarse de las reducciones previstas en la reforma laboral: 100% de las cuotas de la Seguridad Social durante los 2 primeros años de actividad.
Por último, las asociaciones han hecho llegar al Gobierno su preocupación ante el nuevo contrato indefinido para Pymes que recoge la nueva normativa laboral. Esta nueva modalidad de contrato para empresas de menos de 50 trabajadores fija el periodo de formación en un año, después del cual se puede despedir al trabajador sin ninguna compensación.
Por otra parte, la reforma recoge deducciones fiscales de 3.000 euros para quien contrate a su primer trabajador menor de 30 años bajo esta modalidad, y de hasta el 50% del paro que le quedara por cobrar al empleado si este estaba percibiendo la prestación, siempre que el empleador se comprometa a mantener el contrato durante al menos tres años.
Las asociaciones piden al gobierno que sancione a aquellas empresas que se beneficien de las deducciones fiscales o bonificaciones de la Seguridad Social (exigiéndoles que devuelvan las cantidades percibidas) en caso de despedir a los trabajadores al finalizar el primer año de contrato (es decir, cuando el empleado haya terminado el periodo de formación).
Desde Infoautonomos nos gustaría conocer vuestra opinión sobre estas propuestas ¿Consideráis que son demandas acertadas, que deben ser incluidas en un texto legislativo? ¿Se adecuan a las necesidades actuales del colectivo? ¿Qué otras propuestas haríais vosotros?