¿Cuál es la diferencia entre un trabajador independiente que fracasa y otro que triunfa? ¿Depende de los obstáculos que cada uno debe superar?, ¿Es el talento natural? ¿Influye la constancia?
Malcolm Gadwell, uno de los escritores y sociólogos que más ha investigado sobre estas cuestiones (pueden resultarte de interés algunos de sus libros, como La clave del éxito o Por qué unas personas tienen éxito y otras no), tiene una interesante teoría que viene a resumirse como: El éxito reside en la intersección entre la preparación y la oportunidad.
La oportunidad: algunas pueden buscarse, pero otras vienen sin que uno pueda hacer gran cosa por atraerlas o alejarlas de su lado. Por ejemplo, ¿sabías que en Canada los principales jugadores profesionales de hockey han nacido entre enero y marzo? Desde hace ya tiempo el periodo en que se puede empezar a incorporar jugadores junior en las diferentes ligas comienza el 1 de enero. Así que en un equipo formado por chavales nacidos en un mismo año, tienen una diferencia importante los que han nacido en enero-febrero-marzo con los nacidos a final de año. Diferencias de tamaño, fuerza, equilibrio, habilidad… Los cazatalentos comienzan a buscar futuras estrellas entre los niños de entre 9 y 10 años. Pocas veces seleccionan a los que han nacido a final de año, pues los que llaman la atención sobre el resto son los más maduro. La oportunidad, en este caso, pasa mucho más cerca de los que han nacido en el primer trimestre.
Una vez que la oportunidad llega, sin duda el resto depende de la preparación.
La preparación: no se trata tanto de trabaja duro cuando la oportunidad pasa junto a ti, sino de estar preparado para sacarle provecho a la oportunidad. Lo importante es estar preparado. En el ejemplo anterior, el chaval de 10 años elegido para jugar en alguna liga importante, tiene acceso a mejores entrenamientos, a más partidos, a mayor nivel de competición, a mejores compañeros de equipo… Una primera oportunidad te acerca a unas mejores posibilidades de preparación, si las aprovechas, llegado el momento de la siguiente oportunidad, esta se detendrá en ti, y si te has preparado “jugarás en la liga profesional”.
Ya lleves en el terreno freelance media vida como si acabas de empezar o te lo estás planteando dedica un tiempo a pensar sobre esto: ¿Para qué estoy preparado mejor que los demás? y ¿en qué me debería preparar para poder aprovechar la oportunidad que pueda llegar? La conclusión es clara: para lograr el éxito debes prepararte constantemente. Es lo que algunos llaman “buscar las oportunidades” (que en realidad no dependen directamente de ti).
Earl Nightingale dijo una vez que “si una persona no prepara para su éxito, cuando llega su oportunidad, sólo lo hará el ridículo”.
Y con esto, nos vemos en la próxima oportunidad…