El pago de la cuota de Seguridad Social es una las obligaciones más pesadas del autónomo. Tanto es así que el 75% de los autónomos opta en 2019 por la base de cotización mínima, según el II Estudio Nacional del Autónomo (ENA) publicado por Infoautónomos.
La base mínima de cotización se sitúa en 2019 en 944,40 euros y la cuota derivada en 283,30 euros pero si echamos la vista atrás ¿cuánto ha aumentado la cotización del autónomo en la última década?
La base mínima de autónomos se ha encarecido 111 euros
En 2009 la base mínima de cotización se situaba en 833,40 euros lo que supone 111 euros menos que en la actualidad. Y aunque esta cifra denota una gran diferencia, el porcentaje de variación no resulta tan elevado. De hecho, la base mínima de cotización se ha incrementado un 13,3% en la última década y un 1,26% de promedio anual.
La subida porcentual de la cuota de autónomos en los últimos diez años es similar al aumento de la base mínima de cotización en el mismo periodo. La variación ha sido de un 14% lo que ha supuesto un encarecimiento de la cuota de 35 euros durante los últimos diez años. Si en 2009 ser autónomo costaba 248,30 euros al mes, hoy día el autónomo tiene que hacer frente a una cuota mínima mensual de 283,30 euros.
Subida excepcional de la cotización en 2019
En 2019 el sistema de cotización del autónomo experimentó importantes modificaciones. No solo subió la base mínima de cotización un 1,25% sino que excepcionalmente aumentó el tipo general de cotización, que pasó del 29,80% (invariable en los últimos años) al 30%. Si el tipo general de 29,80% anterior a 2019 incluía la cotización por contingencias comunes, el nuevo tipo general del 30% añade las contingencias profesionales, el cese de actividad y la formación. Este aumento del tipo supone pagar más por ampliar coberturas sociales.
Para poder financiar este aumento de coberturas, el tipo de cotización se irá aumentando progresivamente cada año hasta 2022: 30,3% en 2020, 30,6% en 2021 y 30,9% en 2022.
Lo que está por venir en la cotización del autónomo
Una de las reivindicaciones históricas del colectivo de autónomos es la implantación de un sistema de cotización ajustado a los ingresos reales y con ello una cuota progresiva que supondría la reforma del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA); esta reforma lleva en estudio, análisis y valoración desde finales de 2017 y los avances son tímidos. La difícil coyuntura política, sin acuerdo de Presupuestos Generales 2019 y en la antesala de elecciones generales, ralentiza el ritmo de la reforma.
Entonces, ¿para cuándo una cotización ajustada a los ingresos reales del autónomo? La respuesta a la pregunta permanece en el aire. Por el momento, lo único seguro es que las coberturas recientemente incluidas en la cotización del autónomo se mantendrán gracias al aumento progresivo del tipo general del que hablábamos.