Si lo prefieres puedes escuchar este artículo sobre cómo afecta la Autenticación Reforzada del Cliente o SCA al autónomo pinchando aquí:
Finalmente la Autenticación Reforzada del Cliente o SCA ha demorado su entrada en vigor. La complejidad de su aplicación técnica ha hecho que el Banco de España se acoja a la moratoria que las instituciones europeas habían previsto para los diferentes estados miembro.
Y, aunque el supervisor español no ha especificado el tiempo adicional que se concederá, desde el primer momento, la fecha de noviembre de 2020 (14 meses después de lo previsto) siempre ha estado en el horizonte.
Con el dato de cuándo se hará efectiva esta normativa en el aire, debes saber qué es y cómo implementar este nuevo requisito que cambiará el método en el que ahora cobras con tarjeta a tus clientes o realizas las transferencias bancarias.
¿Qué es la Autenticación Reforzada del Cliente o SCA?
La Autenticación Reforzada del Cliente también es conocida por sus siglas en ingles SCA (Strong Customer Authentication) y se trata de un nuevo requisito de identificación del cliente a la hora de efectuar el pago de un bien o servicio con tarjeta, vía online, o transferencia.
Y es que, si hasta ahora bastaba con mostrar el DNI o meter el PIN de la tarjeta, en cuatro días tendrás que solicitar al cliente un método más que lo identifique como la persona que dice ser.
Con esta nueva medida se pretenden crear medios de pago seguros y evitar operaciones fraudulentas dentro del Espacio Económico Europeo.
¿Y cómo puedes llevarlo a cabo?
¿De qué manera puedes hacer la Autenticación Reforzada del Cliente o SCA?
El propio articulado de la norma establece las fórmulas por las que tendrás que proceder a esa segunda verificación para que se haga efectivo el pago. Deberás solicitar de tu cliente:
- Algo que solo conoce el usuario: que bien puede ser una pregunta secreta, una contraseña o un PIN.
- Algo que posee el usuario, como por ejemplo una tarjeta inteligente o un móvil.
- O algo que le es propio como su voz, reconocimiento ocular o su huella dactilar.
Por tanto, esta normativa afecta al autónomo que cobra por su producto, al banco que emite la tarjeta utilizada por el usuario y, obviamente, al cliente que tendrá que proceder a identificarse de dos maneras por cada transacción que quiera realizar.
¿Cómo adaptarte?
Para adaptarte a la nueva normativa tienes varias posibilidades:
- Puedes ofrecer a tus clientes métodos de pago eWallet, como Google Play, Apple Play o PayPal, que ya incluyen un método de autentificación reforzada.
- O solicitar la segunda identificación a través de los sistemas que permiten los smartphones.
- También pedir a tu cliente un código vía SMS además de un PIN o contraseña.
- O contratar una pasarela de pago por Internet para que ellos se ocupen de todo por ti.
Exenciones a la Autenticación Reforzada del Cliente o SCA
Pero aún queda espacio para respirar, porque la propia Directiva PSD2 establece determinadas exenciones a esta Autentificación Reforzada del Cliente o SCA para pagos que son considerados de “bajo riesgo”.
Hablamos de:
- Pagos por una cuantía inferior a 30€.
- Transacciones de bajo riesgo por debajo de los 100, 250 y 500 euros según la tasa de fraude que tenga reconocida la entidad emisora de la tarjeta con la que quiera efectuar el pago el cliente.
- Cuando se trate de un pago recurrente por un mismo precio ante un mismo negocio, se requerirá la SCA para el primero de ellos, pudiendo el resto quedar exentos.
- Cuando como comerciante hagas un cargo automático a la cuenta de tu cliente (porque sea suscriptor a tu web, por ejemplo) deberás proceder a la Autenticación Reforzada del Cliente o SCA la primera vez y obtener de él una suerte de “mandato” para poder seguir haciéndole cargos sin tener que pasar el procedimiento de la SCA de manera reiterada.
Recomendaciones ante la entrada en vigor de la Autenticación Reforzada del Cliente o SCA
Dentro de toda esta vorágine e incertidumbre las recomendaciones son sencillas.
Lo primero, sin duda, es ponerte en contacto con tu proveedor de servicio de pago para asegurarte de su nivel de riesgo de fraude y así saber qué tipo de transacciones quedarían exentas y conocer sobre el aumento de la seguridad de las transacciones por su parte.
Y, en segundo lugar, empezar a educar a tu cliente en los nuevos procesos de pago para que cuando definitivamente entre en vigor la norma, todo sea más rápido y sencillo.
Aunque quede pendiente conocer la fecha exacta sobre cuándo entrará en funcionamiento este nuevo procedimiento, debes estar preparado para agilizar los procesos de pago y evitar pérdidas. Sabemos que son momentos de cierto caos y por eso es tan importante que acerques a tu negocio lo que te proporcione tranquilidad.
Confía en un asesor como los especialistas de Infautónomos para que te informen sobre las novedades legislativas que puedan afectarte y soporte por ti el peso de la llevanza de la contabilidad y la presentación de impuestos.