La vivienda habitual juega un papel importante en tu declaración de la Renta. En función de la fecha de adquisición y del tipo de contrato la vivienda habitual será deducible o no en tu IRPF del ejercicio 2017. Descubre en las siguientes líneas cómo funciona la deducción por vivienda habitual en la Renta conforme a la normativa tributaria.
Deducción por vivienda habitual en la Renta 2017: ¿en propiedad o contrato de alquiler?
Se trata de una cuestión fundamental y muy influyente en tu declaración de la Renta ya que las fechas establecidas para la deducción de la vivienda habitual varían en función de si eres propietario de la vivienda o si tienes un contrato de arrendamiento.
Deducción por adquisición de vivienda habitual
En el primero de los casos solo podrás beneficiarte de la deducción de vivienda habitual si la fecha de adquisición fue anterior al 1 de enero de 2013 . Es entonces cuando como contribuyente te deducirás la inversión realizada, siempre y cuando, hayas aplicado la deducción en 2012 o en año anteriores.
Es importante hacer hincapié en que esta deducción no solo se cierne a compra o adquisición de vivienda habitual sino que también se extiende a la rehabilitación de la vivienda en los siguientes términos:
- Que las obras hayan sido declaradas como actuación protegida en materia de rehabilitación de vivienda.
- Que las obras tengan por objeto la reconstrucción de la vivienda mediante la consolidación y el tratamiento de las estructuras, fachadas o cubiertas y otras análogas, siempre que el coste total de las actuaciones exceda de los límites establecidos en el Reglamento del Impuesto.
El importe máximo de deducción por las inversiones dirigidas a la adquisición y rehabilitación de vivienda habitual es de 9.040 euros, lo que supone un 15% de los gastos hipotecarios. En caso de alcanzar este límite el contribuyente conseguirá la deducción máxima de 1.356 euros anuales.
Aunque estas son las cuantías generales no hay que perder de vista la particularidades de las deducciones autonómicas ya que algunos territorios autonómicos posibilitan la ampliación de estos límites.
Deducción por alquiler de vivienda habitual
También te beneficiaras de incentivos fiscales si vives en un inmueble alquilado y tu base imponible es inferior a 24.107,20 euros. Como adelantábamos unas líneas más arriba la fecha de contrato de arrendamiento ha de ser anterior al 1 de enero de 2015. Si es tu caso pero estás pensando en cambiar de vivienda analiza si realmente te conviene el cambio o si, por el contrario, debes permanecer en la vivienda para acogerte a la reducción.
Para las cantidades satisfechas en el período impositivo por el alquiler de la vivienda habitual el límite también asciende a 9.040 euros. Fuera del límite estatal, las comunidades autónomas contemplan sus propias cuantías máximas de deducción que en algunos casos pueden alcanzar el 15% de las cantidades satisfechas en el período impositivo por el alquiler de la vivienda habitual del contribuyente.
Si después de leer estas líneas aún te quedan dudas o simplemente te supone un embrollo la aplicación de estas deducciones, despreocúpate. La asesoría online de Infoautónomos se pone a tus disposición para elaborar y presentar tu Declaración de la Renta 2017.
Deducción de gastos de la vivienda afecta
Si has habilitado un espacio de tu casa en tu alta en Hacienda puedes deducirte los suministros domésticos afectos a la actividad pero no conforme al criterio de la nueva ley de autónomos. El artículo 11 de la Ley de Reformas Urgentes del Trabajo Autónomos, solo permite la deducción de un 30% de la factura de suministros, eso sí, sobre el total de superficie destinada a la actividad. Sin embargo esta deducción no será aplicable hasta la Renta del ejercicio actual, el 2018.
En el ejercicio 2017, el que se declara en la campaña de este año, la deducción de estos suministros de la vivienda afecta es, si cabe, más limitada.
El criterio tácito de Hacienda antes de la nueva medida activa desde 2018 permitía la deducción de los gastos en su totalidad siempre y cuando se pudiera demostrar la afectación de los mismos a la actividad. Y era en este punto dónde la Agencia Tributaria dificultaba especialmente la deducción de los gastos ya que exigía instrumentos de control como contadores diferenciados para uso particular y laboral, una situación nada habitual en las viviendas afectas de los autónomos.