Ya sabes ese refrán que dice “las cosas de palacio, van despacio”. Si vas a pedir una subvención para autónomos o pymes, te recomiendo que tengas paciencia. Mucha paciencia. No pienses que te han rechazado la ayuda o se han olvidado de ti solo porque hayan pasado unas cuantas hojas del calendario. Y es que el proceso es bastante largo de por sí, pero todavía se puede retrasar más en función de la Comunidad Autónoma a la que pertenezcas y del organismo que la gestione. Vamos a analizar cuál es el procedimiento y cuánto se demora cada fase.
1.El tiempo de tramitación
El primer paso es encontrar una ayuda que se ajuste a las necesidades de tu empresa. ¡Ojo! Ten en cuenta que se trata simplemente de un incentivo, no de una forma de financiación, así que no condiciones todo tu negocio a este posible capital. Ten siempre un plan B.
A veces, puede que la subvención que te interese todavía no se haya publicado este año y tengas que esperar. Como decía al inicio: paciencia. Si ya se ha abierto la convocatoria, tendrás que realizar la solicitud. Esto puede darte algún dolor de cabeza, ya que en la mayoría de casos es necesario adjuntar información extra como el plan de negocio o la memoria del proyecto. En este sentido, conviene que hagas los trámites de forma telemática y que cuentes con la ayuda de un asesor. Así, serás más ágil.
Para algunas subvenciones el período de resolución no comenzará hasta que finalice el plazo de tramitación, lo que puede ampliar un poco más la espera. Esto ocurre en aquellas que se rigen por el régimen de concurrencia competitiva, es decir, cuando el dinero se reparte teniendo en cuenta una valoración de los proyectos. En otros casos, no obstante, las ayudas se conceden hasta agotar los fondos por orden de presentación y es muy importante ser rápido. Infórmate de qué criterio se sigue en la vayas a solicitar.
2. El tiempo de resolución
En este punto empiezan los nervios. ¿Te concederán la subvención? ¿La habrán rechazado ya y por eso no tienes noticias? Tranquilízate. La resolución de la ayuda, independientemente de que sea positiva o negativa, tarda a llegar entre tres meses y un año. No hay una cifra exacta porque depende en buena medida del territorio y de la subvención que hayas pedido.
3. El tiempo de cobro
¿Cuánto se tarda en cobrar una subvención? Lo normal es que, una vez que se publica la resolución, te ingresen el importe que te corresponde en un plazo de entre tres y seis meses. Esto es tan solo una orientación porque la realidad depende de muchos otros aspecto, como por ejemplo el presupuesto de la Administración. De hecho, en algunas ocasiones el cobro puede llegar a demorarse incluso más de un año. Además, ten en cuenta que para cobrar la subvención será imprescindible que estés al día como autónomo o empresario de los pagos de la Seguridad Social y de Hacienda.
Este retraso es un motivo más para que no confíes ciegamente en el dinero de la ayuda a la hora de poner en marcha acciones importantes en tu empresa. Grábate a fuego eso de que una subvención es solo un pequeño impulso.
4. El tiempo de seguimiento
No creas que todo acaba cuando cobras la subvención. A partir de ese momento, el organismo que gestiona la ayuda empieza una fase de seguimiento. Esto significa que podrán pedirte toda la documentación que consideren para justificar el dinero que te han concedido.
En definitiva, cada subvención maneja sus propios plazos y hay que atender a multitud de factores, pero como mínimo el proceso se alarga unos 6 meses a partir del momento en el que haces la solicitud.