En mayor o menor medida todos nos vemos imbuidos del espíritu navideño que nos asalta desde los anuncios televisivos o las luminosas calles de nuestra ciudad en esta época del año. Los comercios se engalanan, los colegios cierran, las familias se reúnen y… el consumo se dispara.
Para los autónomos esta es una etapa en la que la conciliación puede ser más complicada, más ventas, más trabajo y también más “obligaciones” extra laborales que atender, que se traducen en una mayor sensación de no estar haciendo las cosas correctamente. Pero con una buena organización y utilizando los recursos necesarios podemos superar esta etapa, incrementar nuestro negocio de forma segura y dar la bienvenida al nuevo año satisfechos con los resultados alcanzados.
Dependiendo del tipo de actividad que realices, tu día a día se verá más afectado. Los buenos deseos que nos acompañan durante estas semanas pueden incentivar nuestros impulsos consumistas, pero también los festivos. Muchas reuniones de celebración previas, que suponen más trabajo para algunos, como bares y restaurantes, pero que disminuyen el ritmo de trabajo en muchas empresas, con los empleados pensando más en las futuras vacaciones que en realizar alguna tarea.
Por eso, si tu negocio no se encuentra entre los que tiene una etapa de consumo álgido en estas fechas, lo mejor que puedes hacer es ser previsor, adelantar trabajo y echar el cierre durante estos días. Si ofreces tus servicios online, no te olvides de avisarlo con tiempo para que ningún cliente pueda llegar con una necesidad de última hora que no puedas resolver.
Y si mi producto o servicio es muy solicitado en Navidad
Como hemos comentado, la Navidad es una época en la que el gasto en bienes y servicios se incrementa de forma sustancial, por lo que para muchos autónomos es un momento crucial para cumplir con las previsiones de ingresos anuales.
En este caso, también debemos planificar de antemano la campaña para no vernos sobrepasados por la situación y convertidos en el Grinch de las fiestas.
- Realizar una evaluación previa: conocer el stock de producto disponible, nuestros plazos de producción, nuestra capacidad de prestar un determinado servicio. Así evitaremos comprometernos con algo que no podemos cumplir.
- Incrementar nuestros recursos para aumentar nuestra capacidad temporalmente: contratando personal eventual o servicios externos para un determinado periodo que nos permitan satisfacer las necesidades de estos días concretos.
- Mejorar nuestros procesos internos: hacer una revisión de los mismos, actualizar maquinaria y equipos que estén obsoletos y automatizar lo que sea posible para agilizar nuestros plazos y llegar a tiempo a cumplir nuestros contratos.
- Revisar nuestras políticas de gestión del crédito: utilizando la información sobre empresas que nos ofrecen marcas como eInforma, que incluye un rating propio y una evaluación del crédito máximo aconsejable a corto plazo, podremos decidir más rápidamente el aceptar a una empresa como cliente o proveedor.
- Incluir en nuestra planificación el tiempo para asuntos propios: si reservamos unas horas en nuestro calendario de obligaciones va a ser mucho más fácil llegar a todo durante estos días de gran actividad.
- No olvides a los clientes fieles, planifica algún detalle para ellos: desde un e-mail de agradecimiento a un pequeño detalle, o descuentos especiales.
Si con todo esto superas con éxito, tanto personal como profesional estas fechas, otro consejo, no olvides seguir poniéndolo en práctica el resto del año. Y si la cosa no va tan bien, toma buena nota y aprende de los errores cometidos para que no se repitan en 2020.