Solo cinco comunidades autónomas ofrecen deducciones en el IRPF para los profesionales autónomos que residan en ellas.
Y no son beneficios fiscales “genéricos”, cada comunidad establece una serie de requisitos.
Estas deducciones autonómicas para autónomos son independientes de las deducciones de carácter estatal. Descubre cómo son y qué requisitos necesitas cumplir para beneficiarte de ellas.
Asturias: 1.000 euros para menores de 35 años
La deducción autonómica en Asturias asciende a 1.000 euros, pero exige tres requisitos:
- Ser menor de 35 años.
- Darse de alta por primera vez como autónomo.
- Realizar la actividad en una zona rural y mantenerla durante al menos un año.
La clave de la deducción para autónomos de la Comunidad Autónoma de Asturias es el traslado de la actividad profesional del trabajador por cuenta propia a una zona en riesgo de despoblación.
El Principado busca reducir la brecha de la conocida como “España Vaciada”.
Canarias: 300 euros para los que cambien su lugar de trabajo a otra isla canaria
En Canarias el autónomo que traslade su actividad profesional de una isla a otra podrá beneficiarse de una reducción de 300 euros en el IRPF, pero los requisitos van más allá del mero traslado:
- Tendrá que mantener el cambio de lugar de trabajo durante un mínimo de 4 años.
- Deberá justificar unos ingresos inferiores a 39.000 euros en tributación individual o 52.000 euros en tributación conjunta.
Cantabria: 500 euros para los que trasladen su actividad a un núcleo despoblado
Cantabria es otra de las comunidades autónomas que apuesta por solucionar el grave problema de la despoblación en los núcleos rurales.
Pero en este caso no hay requisitos adicionales para poder acceder a esta deducción autonómica en el IRPF.
El gobierno cántabro establece como único requisito el desplazamiento de la actividad profesional a una zona despoblada.
Madrid: 1.000 euros para menores de 35 años que inicien su actividad
La Comunidad de Madrid trata de apoyar con su deducción autonómica a los jóvenes emprendedores que acaben de iniciar su actividad.
Es la más generosa junto con Asturias, pero Madrid reduce los requisitos al mínimo. Para aprovechar la deducción, el autónomo:
- Tendrá que ser menor de 35 años.
- Deberá realizar el alta en el RETA por primera vez.
Entre las deducciones fiscales para autónomos, la Comunidad de Madrid ofrece la más interesante tanto por el importe como por las facilidades para acceder a ella.
Comunidad Valenciana: 418 euros por cada hijo (solo para mujeres autónomas)
La Comunidad Valenciana se desmarca del resto con una deducción centrada en las trabajadoras por cuenta propia que sean madres y cumplan los siguientes requisitos:
- Tener al menos un hijo de entre tres y cinco años.
- Contar con ingresos inferiores a 25.000 euros anuales en la declaración individual o 40.000 euros en la conjunta.
En este caso no entra en juego la ubicación de la trabajadora dentro de la Comunidad Valenciana. Dicha deducción es aplicable tanto a las autónomas residentes en ciudades como en pueblos.
El beneficio fiscal de esta comunidad asciende a 418 euros por cada hijo de entre tres y cinco años.