Normalmente, cuando una Pyme o un autónomo buscan un diseñador gráfico profesional es porque ha relacionado el hecho de que su negocio no vende como debería, con el otro hecho de que vivimos en un mundo cada vez más visual y más profesionalizado en términos de comunicación y expresión de las marcas.
Otros porcentajes se deben a empresas que están continuamente revisando y mejorando sus marcas para adaptarse a los tiempos y mantenerse por delante de su competencia, o empresas y negocios que empiezan de cero.
Por qué contratar un diseñador gráfico
La competencia empuja y no para de correr. Posiciona sus marcas cada vez con más precisión con la idea de comunicar a sus audiencias que sus productos o servicios contienen un valor añadido propio y diferenciado y que están pensados para proporcionar satisfacción plena a sus clientes. Y, por si no lo sabes, una marca es algo más que un logo. Las marcas son a un negocio, lo que los nombres a una persona. Tienen personalidad propia, se comunican con los demás (sus audiencias) con su propio tono y proyectan una imagen externa e interna coherente con sus principios y objetivos.
[Tweet «La marca es más que un logo. Tiene personalidad propia y se comunica con los demás #emprendedores»]
La imagen que tu marca proyecte a través de todos los puntos de contacto con tus clientes, proveedores y la sociedad misma, debe ser sólida y coherente con sus valores y personalidad, y comunicar un mensaje claro. Tanto si lo que requieres de tu diseñador es un logo, un folleto de ventas o una web, por ejemplo, lo que te va a proponer de entrada, es organizar y alinear todos tus elementos de comunicación, de manera que te permita proyectar una imagen profesional y creíble de tu empresa, y competir con ciertas garantías.
La 5 Claves
Las estadísticas indican que para la práctica totalidad de los mortales que buscan información antes de hacer una compra de un producto o servicio, Google se ha convertido en el buscador de referencia. El “Sancta Sanctorum” de las búsquedas.
A pesar de esto, para un sector tan específico como es el de pymes y de negocios unipersonales de autónomos (microempresas), la recomendación directa sigue siendo definitiva a la hora de contratar a un nuevo proveedor. Y el paraguas que da cobertura, con carácter general, a esta recomendación se reduce a la FIABILIDAD y GARANTIA del profesional y/o de la empresa que se contrata. Así que, partiendo de la base de que no habría relación proveedor-cliente sin dar por supuesta la CALIDAD del producto o servicio, las 5 claves serían:
1. Precio
La primera incógnita a resolver es ¿cómo hago para resolver mi problema, con los recursos que tengo?
Lo sé, la crisis ha hecho y sigue haciendo estragos, pero ten siempre en cuenta que lo barato no siempre significa que estés haciendo la mejor inversión. Si apuestas exclusivamente por el precio, a costa de la calidad, te arriesgarás también a dejar tu problema resuelto a medias y tendrás que volver al principio, tarde o temprano.
Pide presupuestos y compara, pero el diseñador gráfico que buscas debe proporcionarte soluciones y precios a medida y comprometerse, inexcusablemente, con los plazos de entrega.
[Tweet «El diseñador gráfico que buscas debe proporcionarte soluciones, precios a medida y, sobre todo, compromiso»]
2. Fiabilidad, experiencia y profesionalidad
Condiciones sin las cuales no te puedes plantear contratar un diseñador gráfico que te ofrezca garantías.
Un proveedor fiable se compromete desde el minuto uno a cumplir con los términos acordados y solicitados por ti y tu empresa, y a satisfacer plenamente tus expectativas.
Desde ese primer minuto verás que las preguntas que te hará, tendrán mucho que ver con la visión de tu marca, objetivos de tu negocio, tu competencia y, sobre todo, con el perfil de tu audiencia. Tu target.
3. Agilidad
Una característica común a cualquier empresa, pyme o autónomo, es que cuando plantean resolver su problema, quieren la solución lo antes posible y, si hay algo que un diseñador gráfico profesional y con experiencia tiene, es la habilidad para entender el problema y plantear la solución con rapidez. Lo que tampoco hay que confundir con la magia. El diseñador sigue un proceso creativo y de ejecución que no se resuelve pulsando la tecla “¡Solución ya!”. Esa tecla no existe en ningún teclado. La solución requiere su tiempo.
[Tweet «Las pymes tienen la ventaja de ser más ágiles a la hora de implementar cambios»]
Personalmente, respeto profundamente a todos mis competidores, grandes o pequeños pero, por mi experiencia en las dos orillas, te digo que algunas ventajas de las empresas pequeñas, es que son más ágiles (no necesitan reunirse internamente horas y horas para ponerse en marcha), y tienen capacidad para presentarte sus propuestas en un plazo de tiempo más corto.
4. Comunicación
Algo fundamental a la hora de contratar un diseñador gráfico, es que haya una comunicación tan frecuente como sea necesaria, para que la colaboración entre ambos sea fluida y eficiente.
No tenéis que hablar a cada minuto, pero sí entender que debe haber una disponibilidad rápida para que el proyecto lleve un ritmo que permita entregarlo en el tiempo previsto.
Y volviendo al tamaño de la empresas, otra ventaja adicional de las pequeñas, es que tienen un contacto más cercano y directo con sus clientes.
5. Respeto mutuo
Por último, la relación profesional debe establecerse siempre sobre la base del respeto mutuo.
[Tweet «La relación profesional entre emprendedor y diseñador gráfico debe basarse en el respeto mutuo»]
Este es un principio irrenunciable para mí, así como que establecer una relación profesional transparente y honesta.
Igual que cuando vas al dentista, escuchas con atención y respeto sus comentarios profesionales, el diseñador gráfico profesional tiene la experiencia y conocimientos suficientes para ayudarte a encontrar la mejor solución al problema específico que le plantees.
Déjale que haga sus propuestas con libertad porque estará pensando en lo mejor para tu negocio. Y si te parece que todavía falta algo para que encaje perfectamente con lo que buscas, proporciónale más información para que tenga una visión más completa de la situación.
Conclusión práctica
Los inicios de una relación profesional normalmente conllevan una relativa incertidumbre, dada por un obvio desconocimiento mutuo previo, pero si tienes en cuenta estas claves, ten por seguro que tu margen de error se reducirá dramáticamente.
A pesar de ésto, y recordando el final de la película de Marilyn Monroe “Con faldas y a lo loco”, “nobody’s perfect!”. Ni tú, ni él.
Sé práctico. Consigue un precio justo y, a medida que el proyecto vaya avanzando, te irás dando cuenta de que estás en manos de un profesional que sabe cómo ayudar a que tu negocio sea más competitivo, más rentable y a que puedas dormir con mayor tranquilidad.
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