Yo no sé qué grado de eficacia tendrán las medidas, pactos y acuerdos que se están alcanzando desde que cambiamos de ministro de trabajo. Pero el caso es que el tema se está moviendo y, quien más quien menos, algún provecho le puede sacar si sabe entender las ventajas e inconvenientes de dichas medidas.
La reforma de las pensiones y el pacto social tendrán (se supone) un largo recorrido. Pero a parte de eso se está “cociendo” un plan de choque para jóvenes parados que sólo durará un año y que puede ser muy interesante para los autónomos.
De los 4,7 millones de parados que los organismos oficiales reconocen que hay en España, 1,5 millones de ellos son menores de 30 años. Y entre los menores de 25 años la tasa de desempleo duplica a la ya terrible media nacional (el 42 %).
Así que la propuesta del ministerio de trabajo es animar a las empresas (sobre todo a las pequeñas, y aquí entran en juego también los autónomos) a contratar jóvenes menores de 30 años sea como sea… Se elimina la cotización a la Seguridad Social y se dejan abiertas casi todas las opciones para quien contrata.
Esto es como un plan renove pero para fomentar la contratación de jóvenes… A lo largo de los seis próximos meses (a contar desde que se empiece a aplicar la medida) quien contrate cumpliendo las condiciones, se ahorrará la cotización a la Seguridad Social hasta un año.
Veamos un ejemplo, si antes contratabas a una persona joven y de acuerdo con el convenio colectivo aplicable el sueldo bruto ascendía a 1.200 euros/mensuales, el coste se incrementaba aproximadamente en un 33% de Seguridad Social a cargo del empresario autónomo, es decir, 396 euros que te ahorrarías con la medida anunciada, con la ventaja de que es aplicable tanto a contratos eventuales como a tiempo parcial.
¿Cuáles son las condiciones?
– Las personas que contratemos deben ser o menores de 30 años o desempleados de larga duración (inscritas en las oficinas de empleo al menos 12 meses en los 18 meses anteriores a su contratación).
– La jornada laboral deberá ser al menos del 50 % de la habitual.
– En el caso de firmar un contrato temporal deberá ser de al menos 6 meses. En el caso de contratos indefinidos, la bonificación durará un año.
Así que esta medida viene a ampliar (aunque sea temporalmente) las otras dos que ya se aplican para jóvenes: El contrato de formación (para quienes no tienen estudios y aprenden un oficio directamente trabajando), que también cuenta con la eliminación de la cotización a la Seguridad Social. Y el contrato juvenil en prácticas (para quienes salen de la universidad). En ambos casos la bonificación la duración del contrato debe estar entre los 6 meses y los 2 años.
El ministro de trabajo presenta esta nueva medida como un medio para animar a quienes están pensando en contratar a alguien a que adelanten su contratación sin esperar a que se produzca una mejora real de la situación económica.
A los sindicatos no les hace mucha gracia… y hay quien dice que es una medida que va en contra de la reforma laboral. Cualquier ayuda y flexibilidad para fomentar la contratación es buena, aunque el propio ministerio de trabajo estima que no serán más de 100.000 los jóvenes que sean contratados a través de esta medida (teniendo en cuenta que son 1,2 millones…).