La vida va cambiando a pasos de gigante, pero las rutinas laborales siguen casi intactas desde hace tiempo y en pleno verano el teletrabajo es una solución laboral a tener en cuenta. El Instituto Nacional de Estadística asegura que solo un 22% de las empresas españolas tiene un programa de teletrabajo. Es un dato curioso teniendo en cuenta que aproximadamente un 40% de los empleos podría realizarse a distancia sin problema. Ahora plantéate la siguiente pregunta como empresario: ¿estarías dispuesto a que tus trabajadores no fuesen a la oficina?
En la mayoría de los casos, es muy probable que la respuesta sea negativa. Los horarios fijos y el control del empleado durante su jornada nos dan cierta seguridad. Pensamos que si estamos al lado, como quien recuerda a su hijo que haga los deberes, conseguiremos que el trabajador rinda más. Pero ¿y si te dijera que estamos muy equivocados?
El teletrabajo puede aumentar la productividad de los empleados hasta en un 23%. Así lo afirma un estudio de Cisco, que también asegura que con esta modalidad el índice de ausentismo podría reducirse un 63% y las empresas tendrían la oportunidad de minimizar los costes económicos del mantenimiento del local en un 18%. Ahora que sabes estos datos, quizá apostar por el teletrabajo no sea tan descabellado, ¿no?
1. Las ventajas del teletrabajo
Más allá de los beneficios económicos que puede suponer para ti el teletrabajo como empresario, esta modalidad también tiene muchas ventajas para tus empleados. Y ya lo hemos comprobado muchas veces (incluso en nuestra propia piel): quien trabaja feliz, trabaja mejor. Estos son solo algunos de los pros:
Permite compatibilizar la vida personal y laboral
El hecho de no tener que desplazarse diariamente a una oficina y ajustarse a un horario establecido da más facilidades para compaginar el trabajo con la familia y los amigos. Muchos padres, por ejemplo, prefieren comenzar su jornada temprano, sobre las 6 de la mañana, antes de que de sus hijos despierten. Después, pueden llevarlos al colegio, llegar a casa y continuar con el trabajo hasta que sea el momento de ir a recogerlos. De este modo, disfrutan de la tarde libre en buena compañía.
Aumenta la productividad
Como decíamos antes, Cisco calcula que la productividad se puede llegar a incrementar hasta en un 23%. Esto se debe a que no es necesario perder tiempo de desplazamientos y a que se evitan muchas distracciones. Por ejemplo, conversaciones con los compañeros, desayunos demasiado largos, reuniones improductivas, etc.
Incrementa el ahorro económico
Esta es una ventaja para ambas partes. ¿Te has planteado el gasto que te supone el mantenimiento de tu local? Si dejases de necesitarlo o, al menos, lo tuvieras abierto menos tiempo verías cómo se reducen las facturas en un gran porcentaje. Además, los trabajadores se ahorrarían los costes de desplazamiento, que pueden llegar a ser bastante elevados en grandes ciudades, y otros gastos como los de las comidas fuera de casa.
Elimina la fronteras
Con el teletrabajo no existen las limitaciones que impone la distancia a los empleos que requieren una presencia física. Puedes contratar a la persona que necesitas, aunque viva en otra ciudad o incluso en otro país, lo que de nuevo beneficia a las dos partes.
2. Los contras del teletrabajo
A pesar de las grandes ventajas, el teletrabajo también tiene una parte negativa. Algunos de los contras que debes evaluar si finalmente decides apostar por esta modalidad de empleo son los siguientes:
- El teletrabajo no se adapta a todo tipo de empleos. En algunos casos, la presencia física es fundamental.
- Este sistema de trabajo requiere mucha disciplina, por lo que no es una buena alternativa para todos los perfiles.
- Aunque hay multitud de herramientas para mantener el contacto, crear un entorno de trabajo en equipo desde la distancia es complicado.
- No todos los hogares están preparados para trabajar en condiciones y eso es algo que podría repercutir negativamente en el comportamiento de tu empleado.
- A veces, el teletrabajo puede llegar a incrementar el estrés del empleado, debido a la dificultad para fijar un horario y desconectar de los asuntos laborales.
En cualquier caso, se trata de ponderar bien las ventajas y los inconvenientes para saber con seguridad qué parte de la balanza pesa más en tu negocio. Si ya lo has probado, puedes compartir tu experiencia en los comentarios para ayudar a otros empresarios.